Sarajevo 1914/ Damasco 2013: algunos hilos conductores

22/09/2013
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“Los indicios de que el mundo del siglo XXI será mejor no son desdeñables. Si el mundo consigue no destruirse con, por ejemplo, una guerra nuclear…”
(“Historia del siglo XX”,  Eric Hobsbawm: p. 576)
 
En el método de análisis histórico de Braudel, uno siente vértigo. Para él (como para Mao), cien años son algo así como cinco días.
Adentrándonos en la historia con esa misma técnica podemos dibujar un “pequeño círculo” de casi un siglo entero, entre dos fechas cruciales: 1914 y 2013.
 
¿Qué importancia tiene (o tuvo) 1914?
 
Esa es la fecha en la cual estalló la Primera Guerra Mundial. ¿El motivo? El motivo, como casi toda excusa en las guerras fútiles, fue algo pueril, el asesinato del archiduque Francisco Fernando de Austria y su esposa, en junio de ese año.

¿Qué importancia histórica tiene el año 2013?
 
Esta fecha pasará a la historia como el año en el cual la humanidad estuvo al borde de la Tercera Guerra Mundial, desactivándose (al menos momentáneamente) en el mes de septiembre, cuando Rusia consiguió persuadir al régimen de Siria que se acogiera a un plan de destrucción acelerada de su armamento químico.
 
Un siglo cabalgando sobre la salvaje y frenética ola del capital financiero internacional
 
Parafraseando una conocida expresión acuñada por Einstein, podría decirse: “La historia no juega a los dados”. En efecto, en el devenir histórico no existen casualidades. En el no existen los cabos sueltos, los hechos aislados y puramente casuales.
 
Un evento (cualquiera su naturaleza) que surge a la “vida real” como efecto, en su debido momento se transforma en causa de otros eventos, y en tal sentido, con relación al período histórico aquí trazado (1914-2013), encontramos algunos hilos que unen causal-mente a estas fechas, que de alguna manera nos permite trazar el círculo en los siguientes términos:
 
1.     Las necesidades de expansión en la conquista de nuevos mercados y recursos naturales estratégicos por parte de las potencias mundiales de la época (EEUU, Gran Bretaña, Francia, Alemania, Rusia (zarista) y Japón, entre las principales), genera una intensa puja por llevar a cabo el primer gran reordenamiento y reparto del mundo a inicios del siglo XX, lo cual se constituye en el factor causal primordial para el estallido de la Primera Guerra Mundial.
 
2.     A su vez, la Primera Guerra Mundial y sus telúricas consecuencias económicasinmediatas y mediatas, genera las condiciones para el “Gran Crash”, más conocido como “La Gran Depresión”, en 1929.
 
3.      “La Gran Depresión”, a su vez, se constituye en el principal factor causal que crea las condiciones para el surgimiento del Tercer Reich, en 1933.
 
4.     En esa cadena de acontecimientos históricos eslabonados, el Tercer Reich se constituyó en principal combustible que inflamó al mundo en el infierno de la Segunda Guerra Mundial, desatada con el fin de apagar la locura del fascismo alemán que amenazaba con extenderse por toda Europa, en 1939.
 
5.     Los devastadores efectos económicos provocados por la Segunda Guerra Mundial (finalizada en 1945), crea las condiciones óptimas para el surgimiento del llamado “Periodo Dorado” del capitalismo internacional (un “segundo reparto del mundo”, de acuerdo a lo ganado o perdido en la guerra por cada potencia que se involucró), y el surgimiento por vez primera en el Occidente desarrollado de la noción del “Estado de Bienestar”, el cual empezó a morir silenciosa y lentamente a partir de 1973.
 
6.     El auge continuo durante casi 30 años (1945-1973) del capitalismo hace reflotar de nuevo su inevitable y crónico ciclo de crisis, consustancial a la naturaleza propia del su modo de producción, acumulación y reproducción, ciclo vicioso que cada lapso de tiempo lleva al sistema capitalista del auge hacia la depresión y la crisis.
 
7.     La crisis mundial del sistema capitalista que estalló con fuerza en 1973, creó las condiciones concretas para el estallido de la conocida “Crisis de los precios del petróleo” en ese mismo año (1973), lo que a su vez propicia la generación de medidas y de políticas anti-cíclicas y anti-depresivas orientadas hacia la subordinación de la economía real al frenesí y los intereses espurios de la banca internacional, en especial, a través de la denominada “financierización” de la economía global.
 
8.     A su vez, la subordinación de la economía real a la lógica (y los intereses) de la financierización de la economía global (a través de la oleada mundial de las medidas monetaristas y privatizadoras de las políticas neoliberales impulsadas por la banca mundial y que asolaron al mundo a partir de 1981), crearon las condiciones ideales para el surgimiento de la Primera Gran Depresión Financiera del siglo XXI, la cual estalló entre julio del 2007 y agosto del 2008.
 
9.     Y es la Gran Depresión financiera del 2008 lo que tiene ahora a las potencias Occidentales y asiáticas, en una nueva puja por un nuevo reparto del mundo (conquista de mercados, recursos estratégicos y geo-posicionamiento militar). Siria (al igual que Sarajevo hace cien años), es tan sólo un mero pretexto. Mañana será Irán, Palestina, El Líbano o cualquier otra pequeña nación.
 
Lo de Siria se desactivó (no sabemos si momentánea o en definitiva), pero el verdadero factor detonante sigue intacto. La crisis bursátil y financiera (la primera Gran Depresión del siglo XXI) está incólume. Al parecer, a diferencia de otros ciclos de crisis, esta vez el sistema capitalista ha tocado fondo (1).
 
La salida tradicional a estos “callejones sin salida” han sido, como lo hemos visto (y como Lenin lo observó en sus análisis desde fines del siglo XIX e inicios del XX) (2), los repartos del mundo vía la guerra entre potencias. Pero esta vez esa solución parece inviable, pues al parecer conduce al uso de las armas nucleares entre naciones con poder equiparable. En otras palabras, esta vez parece poco probable que haya ganadores.
 
Notas
 
1.     Ver al respecto artículo de Ellen Brown: “Siria en la mira”
.
2.     Ver por ejemplo, “Imperialismo, fase superior del capitalismo”, de Vladimir Ilich Lenin.
 
Sergio Barrios Escalante
Científico social e Investigador. Editor de la revista RafTulum. Activista por los derechos de la niñez y adolescentes en la asociación ADINA.
https://www.alainet.org/es/articulo/79479
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