Nuestro hombre en La Habana

Lorenzo Angiolillo Fernández

18/01/2011

Opinión

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Operación Wormold y como filtrar los informes Wikileaks de los EEUU.

Jim Wormold, un simple vendedor inglés de aspiradoras que habita en la Cuba de Batista sin más ambiciones en la vida, decide servir de espía a los servicios secretos británicos. No obstante, y ante la falta de habilidades y vocación como espía, Wormold decide inventarse los informes que les envía a sus superiores. Entre otras cosas, les manda a sus jefes en Londres, en lugar de planos de bombas, planos de sus propias aspiradoras, que sin embargo,"cuelan" en el servicio secreto de Su Majestad, servicio que tiene en gran consideración sus informes. Es una de las mejores novelas de Graham Green: “Nuestro hombre en la Habana”.

En el caso de WikiLeaks, los hechos están en un banco de datos; muchos de ellos, en particular los referidos a gobiernos extranjeros sirven a los intereses de la política exterior estadounidense. ”. De la "fuente confiable", cuando en realidad lo que aparece en las páginas de los periódicos principales y los canales de televisión es una cuidadosa manipulación y distorsión de la verdad. Todos los Wiki-hechos han sido redactados selectivamente, luego son "analizados" e interpretados por los medios corporativos .Todo el material informativo del banco de datos de WikiLeaks está disponible, pero el público en general no se toma el trabajo de consultarlo; lo más probable es que lea las selecciones redactadas e interpretadas por los medios corporativos.

“Hoy los medios corporativos de EE.UU. son un instrumento de la propaganda de guerra, por ello hay que preguntarse: ¿Por qué el NYT va repentinamente a promover la transparencia y la verdad en los medios apoyando a WikiLeaks en la difusión? De forma evidente no hay ninguna prueba de que WikiLeaks sea una operación encubierta de la CIA. Sin embargo la relación estrecha y estructurada de los medios corporativos con los servicios de inteligencia de EE.UU., sin mencionar las conexiones de ciertos periodistas con el aparato de seguridad nacional, hacen que la cuestión del patrocinio de la CIA sea relevante”.

Desde 2001, los medios de EE.UU. han tomado un nuevo papel en la sustentación de la "Guerra Global contra el Terrorismo" y en el camuflaje de los crímenes de guerra patrocinados por EE.UU. Después del 11 de septiembre, el Secretario de Defensa Donald Rumsfeld estableció la Oficina de Influencia Estratégica, u "Oficina de Desinformación" como fuera apodada por sus críticos: "El Departamento de Defensa dice que necesita hacerlo, y van a plantar historias falsas en países extranjeros con el fin de influir en la opinión pública mundial." (Entrevista con Steve Adubato, Fox News, 26 December 2002; véase también Michel Chossudovsky, War Propaganda, Global Research, 3 de enero, 2003).

Considero que la data es cierta, puede haber una que otra contaminación lo que es seguro y preocupante que nadie y pocos investigadores irán a la fuente original , y es aquí donde el sesgo de los medios y diversas publicaciones, matizan y tergiversan las datas según el caso, además reiteramos siempre en función que la elite económica mundial y de las corporaciones, no sean salpicadas, y la política de EEUU, en definitiva sigue siendo correcta para los ojos de las oligarquías y el común, observador, bombardeado de premisas y conclusiones , sin discriminar la verdad de las mismas por asociación prende el criterio que prevalece por miles de centimetraje en la prensa burguesa, por asociación no logra separar, el gran cúmulo de información mediática falsa y distorsionadora. Esto hace que la información se le agregue todo el picante que aguanta como lo evidencia “nuestro hombre en la Habana” y es más si sirve a los intereses que están detrás de la operación mejor aun pasará desapercibido el plano de la aspiradora de Wormold, y la verdad verdadera, de WikiLeaks demuestra, que la creación fantasiosa de los funcionarios diplomáticos y de inteligencia del país, más influyente del globo oficializan como real unas patrañas para justificar sus cargos en el exterior, por ello en el imperio ven fantasmas por todas partes

Y así, “Nuestro hombre en la Habana” queda corto en la invención de informes para satisfacer a su cancillería o central de inteligencia, este es uno de los logros de WIKILEAKS, ver que una novela es superada por la realidad.

Hay que evitar que la campaña contra WikiLeaks en EE.UU., usando la ley de 1917 Espionaje Act, no sea utilizada para controlar el Internet, independientemente de cualquier conclusión, para que no sea manipulado, y utilizado también en este sentido, aquí puede caber perfectamente el cuento del Pío Pío. Agreguemos este elemento a los “informes” de parlamentarios de oposición en el exterior, conocida su creatividad ficticia de la realidad nacional en aras de la buena pro y apoyo crematístico para su campaña de entrega del país, y el picante criollo que nos caracteriza, hacen una mezcla peligrosa para la percepción de nuestra realidad, en las potencias así como en los foros internacionales, pero a diferencia de una novela esta es una comedia irresponsable, que puede convertirse en tragedia para Venezuela, exigimos la seriedad en la matriz de nuestra patria para que se nos perciba como es, con los aciertos y errores pero de forma real, sin uranio enriquecido, misiles, bombas atómicas. Los planos de la fábrica de bicicletas podrían ser una ilusión de base nuclear para los intereses antinacionales y los incautos ciudadanos norteamericanos.

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