Ecos del 76
27/03/2006
- Opinión
El cumplimiento del trigésimo aniversario del golpe en Argentina y la riqueza y variedad de los trabajos y movilizaciones por la verdad, la justicia y la recuperación de la memoria realizadas me impulsa a hablar, una vez más, de la represión a los uruguayos en y especialmente de la que golpeó a la organización a la que pertenezco.
Antes quiero referirme a algunas sinuosidades de la memoria, a los errores en que se puede caer cuando la evocación no reposa sobre escritos, con nombres, fechas e indicaciones precisas de hechos y lugares. Justamente por no haber realizado nunca una denuncia sin respaldo documental y de testigos serios, lo denunciado por nosotros hace treinta años está completamente vigente. La minúscula y diseminada información que destilan las agencias norteamericanas nunca expone datos que las nieguen. Y las mentiras oficiales que sostuvieron otra cosa, después de un largo reinado, en dictadura y en democracia, han ido naufragando. Y nadie, nadie, da la cara por ellas.
1- En los años previos al golpe de Videla -1973 a 1975- los uruguayos exiliados en aquél país sentíamos que ese tiempo en Argentina, con Cámpora presidente y el florecimiento del peronismo de izquierda, formaba parte de otra era, de otro ciclo histórico en la región. Un período de cambios y acumulaciones que harían más débil a la dictadura en nuestro país.
Después del golpe en Brasil, que terminó con el gobierno democrático y popular de Joao Goulart, el efecto dominó actuó contra todo proceso de cambios que osara desafiar la primacía del imperio en la región. Así, un golpe militar depuso en 1971 a Gral. Juan José Torres, presidente constitucional de Bolivia, impulsor de reformas nacionalistas y de una 'democracia de nuevo tipo' a través de la llamada 'Asamblea Popular'. En 1973 fue primero el golpe de Estado de Bordaberry y luego el levantamiento militar contra Salvador Allende.
Así en Argentina, el triunfo del peronismo de izquierda de Cámpora el 18 de marzo de 1973, la liberación de los presos y el crecimiento de la movilización popular se gestó en medio de un continente hostil, articulado por la diplomacia norteamericana.
2- Para los militantes del PVP habían quedado, presos o muertos, muchos compañeros protagonistas del período anterior. Pero se trataba de reanudar las tareas después de las derrotas del movimiento popular, darle continuidad a la resistencia. Frente a las fracturas provocadas por la represión, asegurar la continuidad de nuestro accionar se volvió casi una obsesión.
Había quedado atrás el período iniciado en 1968, con movilizaciones masivas y la instalación de la violencia represiva sistemática por parte del Estado. Todo aquello que fogueó y educó a amplios sectores obreros y populares. Después, todas las aguas de la resistencia se aunaron en el caudal aglutinador de la movilización frenteamplista. Habíamos pasado el 72, 'el año de la furia', como lo llamó Chifflet, la huelga general y la instalación de la dictadura. Muchas organizaciones fueron diezmadas por la represión de esos años.
3- Después del golpe del 24 de marzo de 1976 en nuestra percepción, el 72 se fue juntando con el 76, formando parte de aquella misma furia, de los mismos actos de coraje admirables y de la misma derrota.
El secuestro en Brasil, en noviembre de 1978 de otros dos militantes del PVP, Lilián Celiberti y sus dos hijos pequeños y Universindo Rodríguez, interrumpió lo que habíamos imaginado como el inicio de otra etapa.
Ya buena parte de nosotros se había exiliado en Europa, había discutido lo sucedido tratando de ver en qué habíamos fallado y había vuelto a 'reengancharse' con las actividades de resistencia que se intentaban en Montevideo. Con los secuestros en Porto Alegre, el 78 pareció juntarse con el ciclo 72-76. Y mantener la continuidad de la militancia siguió siendo objetivo principal.
Los militares uruguayos todo lo podían: si era necesario enviar un camión frigorífico para trasladar clandestinamente a Uruguay a militantes de la resistencia uruguaya secuestrados en Brasil, allá salía para Brasil un camión de la Comisión de Abasto. Las dictaduras articuladas en el Plan Cóndor parecían más fuertes que nunca.
No obstante, desde otro corte posible, el apogeo de la dictadura del 78 dio sus primeros signos de agotamiento apenas dos años después, cuando el pueblo derrotó en las urnas el plan político de los militares, en noviembre de 1980.
También allí la continuidad era un factor de importancia porque, a partir de entonces el eje de las acciones y de las alianzas sería, cada vez más, el de la lucha por la democracia. Y la del enfrentamiento político a todas las propuestas de democracia recortada o bajo tutela militar.
4- Sobre aquel período, en estos días se ha anunciado una nueva entrega de 'las desclasificaciones' de documentos realizada por el Estado norteamericano. Tardío y machete goteo de información desde las oficinas de los servicios de seguridad y diplomáticos de los EEUU.
Los documentos desclasificados que se conocieron el jueves 23 de marzo ¿qué aportan de nuevo en materia de conocimiento? Poco, aunque en este caso hay reconocimientos importantes. (1)
¿Qué valor tienen? Un valor escaso, apenas simbólico: permiten verificar la seriedad de las denuncias formuladas por nosotros acerca de la represión contra el Partido por la Victoria del Pueblo, en los años 76 y 77: la subsistencia de alrededor de treinta compañeros desaparecidos, acerca de los que no hay todavía documentación concluyente que provenga del Estado argentino, donde fueron secuestrados.
Sobre esos compañeros tampoco hay reconocimiento por parte del Estado uruguayo, el lugar desde dónde partieron los grupos de tareas que los secuestraron.
Ahora tenemos estas noticias ralas que gotean desde Washington. El 'efecto confirmación' puede tener importancia para algunas de las tareas actuales que importan. Por ejemplo, la acción de los tribunales que se ocupan de esos casos. Todavía no hay sentencias. Bueno no sea impaciente, señor, ¡hace apenas treinta años!, ¡son solo treinta personas!
Pero ya habrá procesos y sentencias. En ese sentido se pronuncia muchas veces la ciudadanía.
5- La anulación de la ley de caducidad parece ser un camino adecuado. Es posible que, en algún momento, haya que hacer una nueva consulta popular acerca de la impunidad. En 1989 la ciudadanía apoyó la ley de impunidad. Desde entonces cambiaron los partidos que gobernaban Montevideo y los que gobernaban el país. Se cambió la constitución sobre aspectos claves, entre otros estableciendo el 'balotaje'. ¿Por qué la ciudadanía no va a poder opinar ahora sobre la validez y pertinencia de la ley que permite que todos estos crímenes permanezcan impunes?
6- En otro terreno, la validación externa de las denuncias sobre atrocidades contra los derechos humanos durante la dictadura, permitirá al país oficial situarse de otro modo frente a los hechos. La versión hasta hace poco oficial sobre lo ocurrido, contenida en los voluminosos tomos editados por la Junta de Comandantes en Jefe, se ha revelado con una sucesión impresentable de falsedades.
La lenta construcción de un relato documentado y serio sobre lo sucedido permitirá, también, a las autoridades de la educación, interesadas en incursionar en la historia reciente, incluir con fuerza científica algunas 'bolillas' del programa curricular para los jóvenes.
Incluir, por ejemplo, con base en textos provenientes de las oficinas diplomáticas y militares norteamericanas, la complicidad del Henry Kissinger, actuando en nombre del gobierno de los EEUU, con los crímenes 'de lesa humanidad' perpetrados por Pinochet, Videla, Banzer, Strossner, Gregorio Alvarez, Aparicio Méndez y demás integrantes de los gobiernos del terrorismo de Estado en esta región del mundo. *
(1) Un emprendimiento completamente distinto y muy valioso son los trabajos hechos a partir de fuentes oficiales estadounidenses y de una rica y variada documentación por parte de la investigadora Vania Markarián quien acaba de publicar "Idos y recién llegados- La izquierda uruguaya en el exilio y las redes transnacionales de derechos humanos, 1967-1984".
- Hugo Cores PVP-567- Frente Amplio, LA REPUBLICA 27/03/2006
https://www.alainet.org/es/active/10979
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