El oráculo de Delfos
20/10/2008
- Opinión
El oráculo de Delfos fue un gran recinto sagrado dedicado principalmente al dios “Apolo” -Dios de los oráculos, de la juventud, de los rebaños, de la poesía, de la música y de las artes en general- que tenía en el centro su gran templo, al que acudían los griegos para preguntar a los dioses sobre cuestiones inquietantes. El oráculo referido se llegó a ubicar situado en Grecia, en el emplazamiento de lo que fue la antigua ciudad llamada Delfos. La leyenda y la mitología cuentan que en el monte Parnaso y cerca de esta fuente se reunían algunas divinidades, diosas menores del canto, la poesía, llamadas musas junto con las ninfas de las fuentes, llamadas Náyades. En estas reuniones Apolo tocaba la lira y las divinidades cantaban. El oráculo de Delfos influyó en gran manera en la colonización de las costas del sur de Italia y Sicilia. Llegó a ser el centro religioso del mundo helénico.
Y si en el mundo helénico se acudió con frecuencia a consultar al oráculo de Delfos, en nuestro país y en nuestra época, las encuestas han ido acrecentando su capacidad de influencia y papel orientador respecto a todo tipo de asuntos de los cuales se desea saber la opinión o tendencias ciudadanas. Y una de las más recientes (la del 10 de octubre pasado de El Universal) concluyó con resultados que en los próximos meses darán mucho de que hablar a todo aquel que esté interesado en política. En la misma se obtuvieron resultados donde el PRI está 10 puntos porcentuales arriba del PAN -5 puntos o 4 enteramente nuevos- y los otros restantes por una caída de Acción Nacional. El PRD -muy abajo con 17 puntos- asciende 2 o 3 puntos, pero de todas maneras lo más relevante de la encuesta es el ascenso del Partido Revolucionario Institucional. Se esté o no de acuerdo con las encuestas me parece que los datos son contundentes, están muy claros y ello implica que el PRI y el PAN están empatados en 40% hace dos meses. El PRI sube 4 puntos y el PAN baja 6 puntos que se repartieron entre 4 al PRI y 2 al PRD. Por su parte el PRD le gana un punto a los partidos “pequeños” que se hacen más pequeños. Pero en el fondo lo que vemos es “ya” el desgaste claro y contundente del gobierno por la crisis económica, por la crisis de seguridad, por el subejercicio presupuestal y su incapacidad para convertir a sus “enemigos” en sólo adversarios o aliados. Los resultados dejan ver con claridad que la mayoría de la población mexicana en el occidente y en el norte del país está transitando de nuevo hacia el PRI.
Es muy normal que todo partido que gobierna se desgaste pero no a la velocidad con la que lo está haciendo Acción Nacional y el leve repunte del PRD no implicará que -si estos números se mantienen hacia el final del primer semestre de 2009- el PRI con 44% de las preferencias se pudiera llevar el 50% más 1 en la Cámara de Diputados, con lo cual acumularía una influencia y poder determinantes que podrían, entre otras cosas, regresar al PRI a Los Pinos en 2012.
El ritmo con el cual se desgasta el gobierno del Presidente Calderón podría implicar que con una caída de 6 % en dos meses podríamos estar en 6 meses más (abril de 2009) en un escenario donde el PAN esté bordeando el 30 o esté por debajo de los 30% y sin que tenga mejores recursos televisivos que su antecesor para revertir esta tendencia en virtud de las restricciones legales de la reforma electoral de 2007 que limitan la compra de espacios en medios de comunicación a las personas físicas y morales. Efectivamente, el apartado “A” del artículo 41 constitucional determina que “el Instituto Federal Electoral -IFE- será autoridad única para la administración del tiempo que corresponda al Estado en radio y televisión destinado a sus propios fines y al ejercicio del derecho de los partidos políticos nacionales” (…) además “ninguna otra persona física o moral, sea a título propio o por cuenta de terceros, podrá contratar propaganda en radio y televisión dirigida a influir en las preferencias electorales de los ciudadanos, ni a favor o en contra de partidos políticos o de candidatos a cargos de elección popular. Queda prohibida la transmisión en territorio nacional de este tipo de mensajes contratados en el extranjero.”
Más claro no podría ser, las condiciones están dadas. En los resultados electorales del 2009 ni el oráculo de Delfos podría estar en desacuerdo sobre la caída estrepitosa que está sufriendo el gobierno federal, menos aún cuando, además de las encuestas, podemos apreciar los primeros resultados de una nueva lógica de la competencia político electoral y de la lucha por el poder. En este escenario veremos además -con toda seguridad- un descenso importante de actores políticos -partidos minoritarios-, como podría ser el caso del partido Alternativa, donde sus efímeros dirigentes nunca quisieron ser campesinos, menos sociales y nuca demócratas y han saqueado a ese partido, dejándolo sin recursos para las indemnizaciones que deben pagar por el despido injustificado de miles de sus trabajadores y, aún cuadros y militantes a que los están condenando las “Juntas Locales de Conciliación y Arbitraje en diversos estados del país y el Distrito Federal. Por otro lado y aunque no haya una nueva demarcación distrital electoral, lo que si veremos es que por efectos de la reforma electoral arriba mencionada habrá un número importante de procesos electorales locales que serán concurrentes con los comicios federales y que tendrán sus efectos políticos en la negociación con las cúpulas nacionales de los partidos políticos (te apoyo en lo federal, pero no en lo local, o viceversa) y que serán determinantes para los resultados en cada entidad federativa donde ello ocurra. Ya veremos. ¿Y usted, cómo la ve?
Y si en el mundo helénico se acudió con frecuencia a consultar al oráculo de Delfos, en nuestro país y en nuestra época, las encuestas han ido acrecentando su capacidad de influencia y papel orientador respecto a todo tipo de asuntos de los cuales se desea saber la opinión o tendencias ciudadanas. Y una de las más recientes (la del 10 de octubre pasado de El Universal) concluyó con resultados que en los próximos meses darán mucho de que hablar a todo aquel que esté interesado en política. En la misma se obtuvieron resultados donde el PRI está 10 puntos porcentuales arriba del PAN -5 puntos o 4 enteramente nuevos- y los otros restantes por una caída de Acción Nacional. El PRD -muy abajo con 17 puntos- asciende 2 o 3 puntos, pero de todas maneras lo más relevante de la encuesta es el ascenso del Partido Revolucionario Institucional. Se esté o no de acuerdo con las encuestas me parece que los datos son contundentes, están muy claros y ello implica que el PRI y el PAN están empatados en 40% hace dos meses. El PRI sube 4 puntos y el PAN baja 6 puntos que se repartieron entre 4 al PRI y 2 al PRD. Por su parte el PRD le gana un punto a los partidos “pequeños” que se hacen más pequeños. Pero en el fondo lo que vemos es “ya” el desgaste claro y contundente del gobierno por la crisis económica, por la crisis de seguridad, por el subejercicio presupuestal y su incapacidad para convertir a sus “enemigos” en sólo adversarios o aliados. Los resultados dejan ver con claridad que la mayoría de la población mexicana en el occidente y en el norte del país está transitando de nuevo hacia el PRI.
Es muy normal que todo partido que gobierna se desgaste pero no a la velocidad con la que lo está haciendo Acción Nacional y el leve repunte del PRD no implicará que -si estos números se mantienen hacia el final del primer semestre de 2009- el PRI con 44% de las preferencias se pudiera llevar el 50% más 1 en la Cámara de Diputados, con lo cual acumularía una influencia y poder determinantes que podrían, entre otras cosas, regresar al PRI a Los Pinos en 2012.
El ritmo con el cual se desgasta el gobierno del Presidente Calderón podría implicar que con una caída de 6 % en dos meses podríamos estar en 6 meses más (abril de 2009) en un escenario donde el PAN esté bordeando el 30 o esté por debajo de los 30% y sin que tenga mejores recursos televisivos que su antecesor para revertir esta tendencia en virtud de las restricciones legales de la reforma electoral de 2007 que limitan la compra de espacios en medios de comunicación a las personas físicas y morales. Efectivamente, el apartado “A” del artículo 41 constitucional determina que “el Instituto Federal Electoral -IFE- será autoridad única para la administración del tiempo que corresponda al Estado en radio y televisión destinado a sus propios fines y al ejercicio del derecho de los partidos políticos nacionales” (…) además “ninguna otra persona física o moral, sea a título propio o por cuenta de terceros, podrá contratar propaganda en radio y televisión dirigida a influir en las preferencias electorales de los ciudadanos, ni a favor o en contra de partidos políticos o de candidatos a cargos de elección popular. Queda prohibida la transmisión en territorio nacional de este tipo de mensajes contratados en el extranjero.”
Más claro no podría ser, las condiciones están dadas. En los resultados electorales del 2009 ni el oráculo de Delfos podría estar en desacuerdo sobre la caída estrepitosa que está sufriendo el gobierno federal, menos aún cuando, además de las encuestas, podemos apreciar los primeros resultados de una nueva lógica de la competencia político electoral y de la lucha por el poder. En este escenario veremos además -con toda seguridad- un descenso importante de actores políticos -partidos minoritarios-, como podría ser el caso del partido Alternativa, donde sus efímeros dirigentes nunca quisieron ser campesinos, menos sociales y nuca demócratas y han saqueado a ese partido, dejándolo sin recursos para las indemnizaciones que deben pagar por el despido injustificado de miles de sus trabajadores y, aún cuadros y militantes a que los están condenando las “Juntas Locales de Conciliación y Arbitraje en diversos estados del país y el Distrito Federal. Por otro lado y aunque no haya una nueva demarcación distrital electoral, lo que si veremos es que por efectos de la reforma electoral arriba mencionada habrá un número importante de procesos electorales locales que serán concurrentes con los comicios federales y que tendrán sus efectos políticos en la negociación con las cúpulas nacionales de los partidos políticos (te apoyo en lo federal, pero no en lo local, o viceversa) y que serán determinantes para los resultados en cada entidad federativa donde ello ocurra. Ya veremos. ¿Y usted, cómo la ve?
Francisco Velasco Zapata
Politólogo. Presidente de Parlamento Ciudadano A. C., Agradece sus comentarios a: comunicacionsocial_pacem@yahoo.com.mx
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