Un Estado terrorista que aterroriza a su Estado

20/12/2012
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Estados Unidos está encerrado en el círculo vicioso de violencia, y que a la vez ésta crece como una bola de nieve. Esa es la contundente conclusión que uno saca después de aquella macabra matanza de 27 personas -20 niños y 7 adultos- cuando un otro casi menor de edad -Adam Lanza- resulto ser el victimario, y víctima a la vez de su pavorosa paranoia, como la de su país, pues terminó su tendencia terrorista, quitándose la vida después de su alienado y asesino ataque, en el que se victimó a su propia madre y su hermano.
 
Ciertamente si ese asesino ataque fue un acto anormal; no deja de ser menos la reacción del pueblo norteamericano, ya que después de conocer que el presidente Obama ordenó que se elabore una ley sobre la tenencia justificada de armas en su país;  hoy en día se han triplicado la venta de las mismas, y a pocos días, nada menos que de las fiestas de navidad, y que en todo caso para el mundo religioso representa un desarme espiritual, ¿qué es lo que está paradójica y paranoicamente está pasando entonces en los EE.UU.? ¿Qué los EE.UU. es un Estado aterrorizado por el terrorismo de Estado? Vale decir su población vive un terrorismo de Estado, bajo un Estado terrorista. Pero no sólo que es un Estado terrorista, si no que el mismo es indignantemente impune.
 
Y esta no es una antojadiza apreciación, o ¿qué conclusión se colige, si hasta el día de hoy el ex mandatario matón y genocida de George Bush, se ha burlado hasta el día de hoy de rendir cuentas por el genocidio de más de un millón de iraquíes, que con el prefabricado pretexto de las armas de destrucción masiva -las mismas nunca aparecieron- destruyeron masivamente Irak, y se apropiaron arteramente de su petróleo. Es más, admitió el asesino asaltante de Bush, que se “equivocaron” al acusar sobre las armas de destrucción masiva.
 
Se explica entonces que los estadounidenses, teniendo como ejemplo, a un presidente a genocida como George Bush; ¿por qué sus súbditos no pueden actuar en la misma medida que su gobernante? O sea, que puedan matar y quedar impunes a la vez. Y ahí está la explicación exacta del porqué, antes de que salga una ley que regule -ni siquiera prohíba- ya han corrido sus conciudadanos a comprar la mayor cantidad de armas que puedan tener. Vale decir que van armarse hasta los dientes, como lo hacen sus gobernantes, quienes a nombre de luchar  contra el terrorismo, terminan siendo más terroristas que los terroristas, y que en pocas palabras ésa es la patología que padecen los estadounidenses, quienes viven aterrorizados por el terrorismo de Estado de sus genocidas gobernantes.
 
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