Los problemas del agro nacional y las comunidades campesinas, que han motivado el paro nacional agrario, deben resolverse a través del diálogo y, por lo tanto, levantarse el Estado de Emergencia que el gobierno ha decretado en varias provincias del país, pues ello solo provocará mayor violencia y nuevas víctimas como ha sucedido con el agricultor José Roca Rojas, ocurrida ayer lunes 18 en las inmediaciones de Huacho y Barranca.

Miguel Jugo, director ejecutivo de la Asociación Pro Derechos Humanos, APRODEH, al tiempo que lamentó el deceso del agricultor, sostuvo que este nuevo asesinato se produce al amparo del Decreto Legislativo N° 982 que permite a las fuerzas policiales utilizar sus armas de reglamento contra manifestantes, como todo indica, ha ocurrido en este caso.

Con relación al Estado de Emergencia declarado por el gobierno en varias provincias de los departamentos de Lima, Ancash y La Libertad, Jugo demandó que se suspenda inmediatamente esta medida que atenta contra derechos fundamentales de las personas, y que lejos de ayudar a solucionar la protesta agraria solo puede contribuir a generar más víctimas.

En ese sentido, denunció que personal de la Infantería de Marina ha aparecido hoy en el distrito de Santa y en Chimbote, en Ancash, hecho que es preocupante y reviste mucha gravedad, pues se estaría cayendo en militarización del país y el uso de la Fuerza Armada en el control de las luchas sociales. Advirtió que en otros departamentos del país como Piura, Huánuco, La Libertad, Cusco, entre otros, se han producido actos de represión policial.

El agricultor Roca Rojas, según todas las evidencias, murió de un disparo de FAL en la cabeza, que es el arma que utiliza la policía. APRODEH exige que se investigue y se sancione al responsable de la muerte del agricultor, pues la impunidad en casos como estos solo alentarán que se produzcan nuevos abusos por parte de las fuerzas policiales. En efecto, al caso de Roca Rojas se sumaría el fallecimiento de otro agricultor aún no identificado en Altos Sihuas, Arequipa, a quien le impactó una bomba lacrimógena.

El representante de APRODEH recordó que Roca Rojas es la segunda víctima por exceso policial en el uso de armas de reglamento, en lo que va del año. En efecto, el pasado 10 de enero en Pucallpa, el niño Jhon Acosta Meneses murió también por disparos de la policía durante un desalojo y el hecho no ha sido investigado hasta la fecha.

Finalmente, Jugo expresó su solidaridad con las demandas de los productores agropecuarios y las comunidades campesinas, pues constituyen un sector social y productivo excluido de las políticas agrarias, e instó al gobierno a no seguir por el camino de la confrontación, sino de la solución de los problemas del agro nacional.

Lima, 19 de febrero de 2008

Área de Comunicación APRODEH
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