Se desarrolla con geopolítica bolivariana

22/09/2007
  • Español
  • English
  • Français
  • Deutsch
  • Português
  • Opinión
-A +A
Con casi 200 años de vida republicana en manos de gobiernos elitistas y oligárquicos Bolivia no pudo desarrollarse adecuadamente ni logró ingresar al mundo moderno de la industrialización y bienestar social. Pese a contar con recursos naturales en abundancia.

Tampoco se pudo en Bolivia sacar del atraso y miseria a grandes capas de la población postergada, especialmente conformada por campesinos, originarios indígenas, trabajadores de fábricas y minas, clases medias, artesanos y pequeños empresarios.

En Bolivia nunca se pudo sobrepasar el PIB per-cápita de 1.000 y el PIB nacional de 10 mil millones de USD. Es decir un país con ingresos menores al promedio mundial

Es en este marco neoliberal y de capitalismo salvaje donde se regalaba materias primas a países del norte industrializado, que surge el gobierno popular de Evo Morales con programa y medidas diferentes a los que Bolivia estaba sometida por siglos.

En primer lugar se busca unidad con países que están dispuestos a colaborar tomando en cuenta esta situación de atraso de Bolivia y que la apoyan de verdad con programas de alfabetización, medicina y salud, apoyo a pequeños empresarios y comunidades campesinas con créditos, tecnologías y mercados, como sucede en los hechos con Venezuela Bolivariana, Cuba, Nicaragua y Ecuador.

Al mismo tiempo avanza la planificación creciente entre países ALBA y en reciente reunión de balance en Caracas se han tomado medidas para profundizar 24 programas de desarrollo económico y social. Entre ellos la creación de Bancos de Desarrollo Nacionales, Banco del Sur, Petrosur, Telesur y apoyo a la integración continental.

Bolivia - con estas pocas medidas que planifican la seguridad energética en la región -ha podido elevar su PIB per –cápita por encima de 1.000 USD y según cálculos ponderados de las NN.UU. - que toman en cuenta el poder adquisitivo relativo de las naciones - Bolivia habría superado 3.000 USD por persona en estos últimos dos años.

Es decir en Bolivia cada habitante puede adquirir con 1.000 USD año lo mismo que adquiere un habitante de Europa o EE.UU. con 3.000 USD año. El supuesto secreto radica en que campesinos bolivianos producen barato con esfuerzo no debidamente compensado por el Estado nacional, y habitantes de las ciudades - que hoy por hoy sobrepasan el 70% de la población total - son directos beneficiados.

No es un milagro de la economía, sino un esquema tradicional que funciona a favor de las ciudades pero en desmedro de campesinos productores, quienes no se permiten ahorro alguno para adquirir maquinarias, equipos o construir caminos y universidades tecnológicas. Se requiere otra política basada en la alianza campo-ciudad.

El Gobierno nacional de Evo Morales ha entendido perfectamente este fenómeno denominado tijera económica-social, que no compensaba esfuerzos de campesinos y agropecuarios por dar seguridad alimenticia barata y previsible a los habitantes tanto del campo como especialmente de las ciudades.

Por eso el Gobierno nacional ofrece créditos accesibles a campesinos y pequeños productores en tractores, tecnologías, asesoramiento, riego, electricidad y caminos.

Factores que en la mayoría de los casos provienen o deberían provenir con mayor fuerza de países ALBA y de la misma planificación nacional. Países ALBA además están interesados en importar alimentos buenos, baratos y de alta calidad como son quinua, qiwicha, amaranto, habas, carnes, soya, maíz, frutas, castañas, palmitos, cañahua, papas, papalizas, camotes, yucas, ajos, aceites, etc.

Con geopolítica bolivariana y teniendo en cuenta el desarrollo acelerado en economías de países vecinos como Brasil, Argentina, Perú, Paraguay y Chile, Bolivia estaría en condiciones de exportarles no sólo alimentos sino también hidrocarburos y energía eléctrica, servicios en ingeniería, ambientales, médicos, tecnológicos, universitarios y corredores de exportación, maquinarias mineras y metalúrgicas, baterías, repuestos industriales y auto-repuestos, muebles, metales de valor agregado, aceros comunes y especiales, hierro esponja y cantidades casi ilimitadas de hierro mineral.

Y posiblemente también tubos de acero para construir los gasoductos proyectados entre Venezuela Bolivariana y Argentina, pasando por la amazonía y cuenca platense suramericanas, y entre Argentina y Bolivia, denominados Gasoductos Sur y del Noreste respectivamente. Con estos planes el socialismo energético en Suramérica será realidad.

Sólo con planes de socialismo y seguridad energéticos entre países UNASUR, Bolivia tiene chance y posibilidades de emerger como país industrializado y moderno. Es la denominada geopolítica bolivariana en acción para favorecer a los más débiles.

No todos los gobiernos de países UNASUR tienen plena conciencia de integración industrial y unidad económica, porque todavía son élites oligárquicas que gobiernan los países de Suramérica y están sometidas mentalmente a planes, estrategia y geopolítica mundial de EE.UU. y Europa.

Planes que dejan de lado a Suramérica como continente o en mejor de los casos pretenden cooptar a países llamados emergentes como Brasil y Argentina, pero sometiéndolos al mismo tiempo con pagos puntuales de enormes deudas externas acumuladas, casi imposibles de pagar sin antes empobrecer a cientos de millones de brasileños y argentinos, como en realidad ocurre.

Brasil y Argentina están obligados para aplicar políticas bolivarianas, aunque se la denomine con otro nombre por el momento, si ambos desean alcanzar el poder industrial, científico y tecnológico de Europa o Norteamérica. Este es el significado de la reunión reciente en Manaos de presidentes Lula, Chávez y Correa. Como también el triunfo que se aproxima de la peronista Cristina Fernández de Kirchner.

Con mayor razón Bolivia, países ALBA y andinos. No hay otra opción o alternativa para países UNASUR que integración y unidad crecientes, pero solamente pocos países todavía poseen gobiernos dignos y antiimperialistas que siguen esta ruta histórica.

En Bolivia se tiene un Gobierno nacional que ha comprendido y aplica esta filosofía libertaria, socialista y bolivariana, y debería ser obligación de sindicatos, militares, curas, estudiantes, universitarios, campesinos, originarios, clases medias, profesionales, técnicos, científicos, amas de casa, juventud, juntas vecinales, escritores, intelectuales y población en general, apoyar esta causa mayor liderada, con no pocos errores y burocracia, pero también firme y decididamente, por el presidente bolivariano de origen indígena Evo Morales.
https://www.alainet.org/es/articulo/123376
Suscribirse a America Latina en Movimiento - RSS