Estimada amiga, estimado amigo: Puedo asegurarle que tengo conocimiento de que su tiempo está en verdad muy ocupado tratando de sobrevivir como mejor pueda en este país kafkiano que nos ha tocado en suerte, y que de ninguna manera me atrevería a ocuparlo de no haber llegado a esta situación desesperante en la que hoy me encuentro. Estoy temblando de miedo y mi angustia es tal que si pudiera me encerraría en mi casa echando llave a todas las cerraduras que la inseguridad me ha obligado a instalar para proteger mis pobres pertenencias de pobre, de otros que cada vez son más pobres; apilaría los muebles contra la puerta, desconectaría el televisor, no escucharía radio, y trataría de mantenerme lo más desinformado que fuera posible hasta pasado el 23 de octubre. Pero no puedo hacerlo, porque mientras en otras constituciones, votar es un derecho, en la nuestra es un deber; de modo que si no concurro al acto eleccionario, habré caído en un delito. ¿Qué es lo que me ha colocado en esta situación? Se preguntará usted. Pues la campaña electoral, ni más ni menos. Todos los candidatos y candidatas en alguna parte de su discurso hablan de honradez; de honestidad, presentándose como una excepción, cuando a mi modesto entender lo extraordinario debería ser lo contrario. ¿Cómo no temblar cuando todos los candidatos necesitan declarase honrados? ¿Cuándo todos hablan de sus competidores acusándolos de delincuentes? Desde los sectores que apoyan al gobierno y a Cristina Fernández, la señora del Presidente, candidata por la Provincia de Buenos Aires, se insinúan vinculaciones mafiosas del ex presidente Duhalde, que fue quien contribuyó para que Kirchner se sentara en el sillón de Rivadavia. Me pregunto entonces: ¿Estoy gobernado por un presidente que en su momento fue apoyado por la mafia y lo aceptó? Chiche Duhalde, ex primera dama que aspira al mismo cargo que Cristina, se defiende y dice que sabe cosas tan terribles de los Kirchner que mejor se calla. Y yo pregunto: ¿Por qué se calla? ¿No sería verdaderamente honesto que si sabe cosas non santas, las denunciara ante la justicia, en bien de la Patria? Moria Casán, vedette, conductora de televisión e impulsora del topless, consideró que había que ponerle el pecho a la política y ahora es candidata a diputada. Digo yo: ¿Su boleta electoral dirá: "Si querés llorar llorá"? ¿Y en este caso, esa frase que la hizo famosa, hará referencia al país? Pero hay más vedettes Ethel Rojo, que ayer no más, hacía nuestras delicias descendiendo por las escaleras coloridas de los teatros de revistas con muy poquita ropa y muchas plumas, ahora es candidata del menemista "Frente Popular". "Conocemos al pueblo, venimos del pueblo, conocemos el gusto popular, conocemos cuáles son las necesidades del pueblo", declaró en Radio Mitre y yo pensé si cuando dice lo de "las necesidades del pueblo", las pretende solventar con lo que otrora exhibía. Y para que la farándula estuviera completa, también Zulma Faiad, "La Lechuguita" que hace treinta años despertaba la pasión de un tomate en la publicidad del aceite La Malgueña, ahora también compite por una banca de diputada porteña, de la mano de los que se pelearon con Macrí, creo que por que lo consideran marxista, y entra en la política con un discurso de elevado contenido ideológico: "Soy una mina con sentimientos y con una cabeza: no tengo una pluma en el culo", declaró y como lo último que se pierde no son las plumas del culo, sino la esperanza, su agrupación se llama: Partido de la Esperanza Porteña y entre quienes la secundan está Ricardo Busacca, que fue jefe de campaña de Luis Patti, el comisario intendente de Escobar, acusado de torturar en épocas de la dictadura y actualmente aliado de Chiche Duhalde, para tener una idea de cual es la ideología de "La Lechuguita". Claudio "el Turco" García, ex delantero de Huracán y Racing, no se quiere quedar atrás y entra en la contienda. Hace poco le dijo a la Diario Deportivo Olé: " Estoy esperando trabajar. Ya hace cuatro años que no laburo y tengo que bancar a dos familias...", lo que justifica su interés en el sueldito de diputado, sostiene que dejó la droga; que no es cierto que estuvo internado en un neuropsiquiátrico, y agrega: "de última, aunque no entiendo nada, me meteré en la política." Lo que no me negará usted que es una gran ventaja porque mire cómo nos va con los que entienden. Y para no dejar de hacer su aporte a la filosofía remata la entrevista diciendo: "No me arrepiento de nada. Yo digo que en la vida hay que probar todo, menos el trozo." Por suerte no es el único futbolista en carrera política: el ex jugador de Boca Antonio Ubaldo Rattin encabeza la lista de concejales en Vicente López. Nito Artaza, que vivió siempre de reírse de los políticos, ahora quiere serlo y también es candidato. Su carrera política comenzó cuando se le quedó un poco de guita atrapada en el corralito y salió a protestar con un sector de la clase media afectada, cuyos miembros por entonces se abrazaban con los cartoneros, los jubilados y los desocupados, a los que llamaban "hermanos", pero en cuanto les devolvieron unos mangos, se olvidaron de todo parentesco. Si lo que quiero es un voto ciudadano, ¿Hay algo más ciudadano que el tango? Bueno pues, Hugo del Carril, hijo y el cantor Hugo Marcel, también son candidatos pero como a mí me gusta el bolero, puedo votar a Mario Clavell que acompaña al macrista Jorge Enríquez, digo en la lista, no con la guitarra. Para que no digan que no lo apoyan los artistas, Kirchner incluyó en sus listas a Claudio Morgado, pero Esteban, su hermano, compuso la música de la publicidad del radical Facundo Suárez Lastra. Pero lo que me puso a temblar, no fue que la farándula y los jugadores de fútbol desocupados incursionen en la política. Sino otros candidatos, por ejemplo figura entre lo que puedo votar, la esposa del mayor Rafael Mercado, que fue la que provocó el pase a retiro de su marido cuando hizo pública una carta de apoyo al obispo Basseoto, en su idea de ahogar en el río al Ministro de Salud, porque opinó que había que despenalizar el aborto y como si esto fuera poco, reparte condones a troche y moche. Lo que según la iglesia es pecado. Pero no es la única esposa de militar en la contienda electoral, también está la esposa de ex jefe del Ejército Ricardo Brinzoni, acusado por su potencial responsabilidad en la masacre de "Margarita Belén", el alevoso fusilamiento de 25 detenidos políticos, ocurrido en 1976, durante la dictadura militar. Si alguna duda tenemos sobre sus ideas políticas, recordemos la despedida que le preparó al genocida Galtieri, cuando murió; al que no sólo rindió honores, sino que lo calificó como "general majestuoso" y que en su momento presentó junto a otros oficiales recursos de Hábeas Data ante un organismo de derechos humanos patrocinado por el abogado Juan Enrique Torres Bande, apoderado de la agrupación política neonazi Partido del Nuevo Triunfo, liderado por Alejandro Biondini. ¿Cómo no se me van a poner los pelos de punta si el propio Biondini, que se hace llamar El Führer, consiguió por fin entrar a la justa electoral con un partido nazi? Resulta que como la justicia le había negado la inscripción al neonazi Partido Nuevo Triunfo, argumentando actos de discriminación. Antonio Montenegro, un seineldinista, decidió prestarles el suyo. La lista de diputados de Acción Ciudadana, que así se llama el partido, está encabezada por el ex comisario Jorge Colotto, uno de los organizadores de la siniestra Triple A, que asesinó a decenas de personas en tiempos del brujo López Rega. Está acusado también de participación en la represión durante la dictadura de la que, al decir del inspector de la Policía Federal Rodolfo Pelegrino Fernández, obtuvo rédito económico, acumulando propiedades como un departamento en la avenida Figueroa Alcorta. La esposa del Fürer, Alicia Quinodoz de Biondini, secunda al represor en la lista de diputados y el Fürercito, o sea el hijo de Biondini, es el primer candidato a legislador porteño. Como corresponde a un partido nazi, lo primero que proponen es prohibir el trabajo a los extranjeros, mientras el preámbulo de nuestra constitución sostiene todo lo contrario. Hay más: Gustavo Breide Obeid, el ex capitán carapintada que se alzara junto a Aldo Rico y Mohamed Seineldín contra gobiernos constitucionales, para impedir que se enjuiciara a los militares acusados de genocidas, también es candidato. Que Margarita Meira, la vendedora ambulante que pasó 14 meses presa por los incidentes de julio de 2004, sea candidata de la Asamblea del Pueblo, no sólo no me molesta, sino que me agrada. Lo que me pone a temblar es ver tanto represor, tanta frivolidad, tanto nazi en carrera hacia el poder y lo que es peor en un país en el que a la novia del ex comisario asesinado, que cobraba un retiro de 3 mil pesos; cuando la justicia descubrió una caja de seguridad en la que guardaba un cuarto de millón de dólares, y le preguntaron: ¿No le llamó la atención semejante monto? Contestó: "No me parece raro. Era un comisario retirado...". ¿No cree usted que tengo sobradas razones para estar más desorientado que bebé de probeta en día de la madre? ¿Comprende porque me permito molestar su atención? ¡Tengo que votar! ¡Ayúdeme por favor!